El Programa LIFE es el instrumento financiero de la Unión Europea cuyo objetivo es contribuir al desarrollo sostenible y al logro de los objetivos y metas de la Estrategia Europa 2020 y de las estrategias y planes de la Unión en materia de medio ambiente y clima.
La Armada participa en el proyecto BIOXISOIL, (LIFE 11 ENV/ ES 505), dentro del programa LIFE de la Unión Europea que permitirá descontaminar el suelo de La Planta Petrolera del Muelle de la Avanzadilla de La Clica, en la Bahía de Cádiz. El consorcio del proyecto está formado por: la Asociación para la Investigación y Desarrollo de los Recursos Naturales (AITEMIN), la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Montes de la Universidad Politécnica de Madrid, la Dirección de Infraestructura de la JAL y el departamento de Medio Ambiente del CIEMAT, en calidad de coordinador.
El proyecto BIOXISOIL se enmarca dentro de la Línea Prioritaria-Suelo de la Unión Europea, que pretende asegurar la sostenibilidad del uso del suelo mediante la restauración de aquellos suelos que actualmente están degradados. El proyecto, que tiene una duración de cuatro años, se inició en septiembre de 2012 y cuenta con un presupuesto total de 2.700.000 €.
El objetivo de BIOXISOIL es el desarrollo de un nuevo concepto en la descontaminación de suelos, que además de reducir la contaminación, consigue una restauración ambiental total del suelo. BIOXISOIL es un proyecto de demostración, cuyo objeto principal es ensayar, en un emplazamiento real de 15.000 m2, se presenta como una propuesta integradora que encaja en el concepto de tecnología verde y que se basa en la optimización de la combinación de técnicas fisicoquímicas y biológicas emergentes, como son las fitotecnologías y la biorrecuperación para recuperar grandes superficies afectadas por contaminación de tipo orgánico.
Los resultados del proyecto, previsiblemente, mostrarán una reducción de los niveles de contaminantes y una mejora de las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo. En último término, se habrá logrado, por un lado, la eliminación de los riesgos de contaminación de las aguas subterráneas y, por otro, aumentar la capacidad de uso del suelo para desarrollar otras actividades.