El Patrullero de la Armada Arnomendi auxilia en la mar al Bonitero “Berriz Gurenaia” durante la Campaña Costera del Bonito
Viernes, 28 de agosto de 2009
+ 2
×
1 / 3
Costado de estribor del patrullero Arnomendi
2 / 3
Procedimiento del tendido del remolque
3 / 3
Personal del patrullero Arnomendi en el auxilio del bonitero Berriz Gurenaia
En el marco de la Campaña costera del Bonito, y durante las labores de Apoyo e Inspección de la Flota Bonitera del Cantábrico, el patrullero de la Armada Arnomendi, con base en Las Palmas de Gran Canaria, prestó auxilio en la mar al pesquero de Fuenterrabía “Berritz Gurenaia”. El buque de la Armada remolcó al bonitero averiado durante más de siete horas hasta dejarlo fondeado ya de madrugada en las proximidades de su puerto base.
El pasado día 25 de agosto el patrullero de la Armada se encontraba realizando su misión de apoyo a la flota bonitera navegando en las proximidades de un grupo de pesqueros a 30 millas al noroeste del faro de San Sebastián cuando a 20:00 recibió la llamada por el canal radio SMM de trabajo del pesquero “Berritz Gurenaia”, matrícula de San Sebastián, informando que tenía problemas mecánicos y que se encontraba sin máquina y sin gobierno.
Inmediatamente desde el patrullero se le ofreció ayuda mecánica y la posibilidad de ser remolcado a su puerto base si fuera necesario.
Un equipo de mecánicos del Arnomendi embarcó en el pesquero por medio de su zodiac para intentar solventar la avería. Una vez evaluada por el jefe de máquinas del patrullero, y ante la imposibilidad de repararla in-situ, a petición del patrón del pesquero se preparó la maniobra de remolque. A las 2200 se inició el remolque procediendo en demanda de Fuenterrabía, puerto base del “Berriz Gurenaia” y distante 32 millas náuticas de la posición de los dos barcos.
En recorrer esas 32 millas que les separaba de la Rada de Higuer (puerto de Fuenterrabía) tardaron 5 horas y media, manteniendo una velocidad de remolque de 6 nudos.
A las 0330 del día siguiente se largó el remolque en la Rada de Higuer, quedando el pesquero a su abrigo fondeado a salvo. El Arnomendi reemprendió inmediatamente su misión en aguas del Cantábrico.
El pasado día 25 de agosto el patrullero de la Armada se encontraba realizando su misión de apoyo a la flota bonitera navegando en las proximidades de un grupo de pesqueros a 30 millas al noroeste del faro de San Sebastián cuando a 20:00 recibió la llamada por el canal radio SMM de trabajo del pesquero “Berritz Gurenaia”, matrícula de San Sebastián, informando que tenía problemas mecánicos y que se encontraba sin máquina y sin gobierno.
Inmediatamente desde el patrullero se le ofreció ayuda mecánica y la posibilidad de ser remolcado a su puerto base si fuera necesario.
Un equipo de mecánicos del Arnomendi embarcó en el pesquero por medio de su zodiac para intentar solventar la avería. Una vez evaluada por el jefe de máquinas del patrullero, y ante la imposibilidad de repararla in-situ, a petición del patrón del pesquero se preparó la maniobra de remolque. A las 2200 se inició el remolque procediendo en demanda de Fuenterrabía, puerto base del “Berriz Gurenaia” y distante 32 millas náuticas de la posición de los dos barcos.
En recorrer esas 32 millas que les separaba de la Rada de Higuer (puerto de Fuenterrabía) tardaron 5 horas y media, manteniendo una velocidad de remolque de 6 nudos.
A las 0330 del día siguiente se largó el remolque en la Rada de Higuer, quedando el pesquero a su abrigo fondeado a salvo. El Arnomendi reemprendió inmediatamente su misión en aguas del Cantábrico.