El Capitán de Navío, Comandante del Centro de Buceo de la Armada (CBA) les da la bienvenida a esta breve reseña de nuestra unidad dentro de la página web de la Armada. Aquí les presentaremos nuestros hitos históricos más relevantes, los cometidos y funciones, equipos con los que trabajamos y las principales operaciones en las que se ha visto protagonista el CBA.
El CBA cuenta con personal médico y personal civil que apoyan al cumplimiento de las misiones asignadas. Entre las aptitudes de buceo se cuenta con tecnólogos de buceo, buzos, buceadores de combate, buceadores elementales y nadadores de rescate. Con todo este personal se generan los Equipos Operativos de Buceo (EOB) para acometer las misiones y trabajos asignados.
El Centro de Buceo de la Armada es el centro especializado en actividades subacuáticas de la Armada y centro de referencia de las Fuerzas Armadas en lo referente a estas actividades y de sanidad en el buceo.
Los cometidos principales del CBA son los siguientes:
1. Como Centro Especializado de Acción Marítima:
2. Como Centro de Referencia de Actividades Subacuáticas.
3. Como Centro de Referencia Medicina Hiperbárica y Subacuática.
4. Respecto de Doctrina y Material de Buceo:
Además de lo anterior, por Orden Ministerial 115/2000, de 14 de abril, el CBA asume las funciones de la desaparecida Unidad de Buceo de la Zona Marítima del Mediterráneo, convirtiéndose el CBA en una unidad generadora de Equipos Operativos de Buceo (E.O.B.). Responsables de efectuar las siguientes misiones:
Por último, decir que la jornada en el CBA comienza con la práctica de actividad física ya que es una parte importantísima en el mundo del buceo militar, permitiendo a los buceadores estar en un estado de forma adecuado para la realización de los trabajos. Los viernes de todas las semanas se realiza el aleteo de una milla náutica en las inmediaciones de la Algameca.
En el CBA hay un EOB que se encontrará realizando una actividad de adiestramiento o un trabajo dependiendo del planeamiento del día. Por otro lado, el resto del personal, que esa semana no está en un EOB, se dispone a realizar las tareas de mantenimiento, la certificación de botellas, la carga de gases, etc.
El CBA se encuentra situado en la Estación Naval de la Algameca (Cartagena), bajo la dependencia del Almirante de Acción Marítima, ejerciendo su mando un Capitán de Navío.
El CBA cuenta con unos medios materiales entre los que destaca: dos cámaras hiperbáricas (CH) fijas, dos CH portátiles, embarcaciones, equipos de buceo autónomo y de suministros de superficie, herramientas submarinas, Sonar de barrido Lateral (SBL) y Vehículos Operado Remotamente (ROV). Además, se dispone de una enfermería para atender enfermedades hiperbáricas.
El empleo de buceadores en la Armada se remonta a la segunda mitad del siglo XV en que se dotó a los navíos de Buzos que, a pulmón, se ocupaban de reparar las múltiples averías producidas por encalladuras, temporales, vías de agua, etc., y de recuperar anclas, artillería, cargamentos, etc.
En las Ordenanzas del Buen Gobierno de la Armada del Mar Océano de 1.633 ya se contempla la figura del Buzo.
Referente a la misión de los buzos, dicen así las citadas Ordenanzas: ''Articulo XV. El buzo tendrá la obligación de hacer todos los reconocimientos que se necesiten debajo del agua, de pasar orinques a las anclas que las hubiesen perdido, y generalmente de practicar cuanto se ofreciera en el agua para el servicio del navío''.
El primer equipo de buceadores de combate constituido como tal, actúa en 1782, minando el estrecho de Gibraltar a nado y al mando del general Grillón.
Por Real Decreto del Rey Carlos III de fecha 20 de febrero de 1787, se constituyen las primeras Escuelas de Buzos en cada Departamento Naval y su primer Reglamento. Estas escuelas se pueden considerar las más antiguas del mundo.
Con todos estos modernos equipos de buceo es necesaria una nueva legislación, aprobándose el 20 de julio de 1904 el Reglamento de Buzos.
Al crearse la Escuela de Submarinos de Cartagena, y a propuesta de su director, capitán de corbeta don Mateo García de los Reyes, se crea la Escuela de Buzos, aprobada por el rey Don Alfonso XIII en la ley de 24 de julio de 1922.
Durante la guerra civil, a través de la creada Comisión de la Armada para Salvamento de Buques, los buzos participan en el salvamento de buques hundidos por la aviación en puertos y aguas poco profundas, destacándose el salvamento y puesta a flote del destructor Císcar en el puerto de El Musel (Gijón). Esta gran campaña consiguió salvar y poner a flote 177 buques, totalizando más de 160.000 toneladas recuperadas.
Por decreto de 12 de marzo de 1942 se reorganiza el Cuerpo de Buzos y en 1946 se construye una nueva Escuela, en la Base de Submarinos. En 1.959, la Escuela de Buzos cambia esta denominación por la de Centro de Instrucción de Buceo (C.I.B.), y los buzos de la Armada adoptan como nuevo sistema de buceo, los equipos autónomos de inmersión, sin abandonar, en ningún momento, los sistemas de buzo clásico con suministro desde superficie.
Con el auge del buceo, al final de la década de los 60, las instalaciones del C.I.B. se quedan insuficientes, trasladándose el 3 de marzo de 1970 a la Estación Naval de La Algameca, naciendo el actual Centro de Buceo de la Armada.
Desde el año 2009 el CBA se encuentra encuadrado en la Fuerza de Acción Marítima en la estructura de la Flota.
Por último, en el año 2020 se celebró el 50 aniversario del Centro de Buceo de la Armada.
Cuenta con una plantilla de 90 personas, en su mayoría buzos aunque hay personal de todas las especialidades.
Una de sus misiones principales son los mantenimientos de la obra viva de los buques del arsenal de Cartagena con: reparaciones a flote tales como taponamientos, colocación de ánodos, limpieza de aspiraciones, etc. Además, el CBA ha participado en operaciones relevantes como son:
Por otro lado, se participa en maniobras nacionales como son: Cartago (Salvamento y Rescate de Submarinos), Marsec (Seguridad Marítima) y Esp Divex. (Intervención Subacuática)
Se realizan tres despliegues anuales en la zona de responsabilidad del CBA, efectuando protección y reconocimiento del Patrimonio Arqueológico Subacuático, adiestramiento en reapariciones submarinas y buceo en condiciones extremas.